El cacao es considerado un superalimento, de hecho es más rico en antioxidantes que el té verde. Esto y su contenido en flavonoides y polifenoles ayuda a prevenir el envejecimiento.
- Ayuda a reforzar el sistema inmunitario.
- Previene enfermedades.
- Contiene magnesio, beneficioso para el sistema nervioso.
- Por su contenido en fibra, es un remedio natural contra el estreñimiento.
- Contiene triptófano, un aminoácido que favorece la producción de serotonina, “la hormona del placer”. Debido a esto, ayuda a mejorar casos de ansiedad, depresiones, etc.
- No se recomienda su consumo a personas nerviosas o con hipertensión arterial, dado su efecto estimulante.
Nueces de brasil: 1 taza
Dátiles remojados: 1 taza
Aceite de coco derretido: 1 cucharada
Sésamo: 1 cucharada
Frutas deshidratadas: 1 cucharada
Cacao puro: 1 cucharada
Nueces pecanas: 1 taza
Chocolate 85%: 30 GR
Mantequilla de avellana natural: 1 CUCHARADA
Harina de avena (yo uso saborizada): 30 GR
Proteína en polvo sabor chocolate: 40 GR
Leche vegetal (yo uso avena): 100 ML
Huevos: 2 UNIDADES
Claras de huevos: 2 UNIDADES
Levadura en polvo: 10 GR
Canela: 1 CUCHARADITA
- Calentamos el horno a 180º.
- Derretimos el chocolate con la leche y la mantequilla de avellana en un cazo.
- Incorporamos en un bol la harina, la proteína, la levadura, la canela, los huevos y mezclamos bien. Cuando esté frío el chocolate, lo añadimos y removemos.
- Probar y ver si necesita endulzante (como yo uso harina saborizada, ya lleva stevia y no necesito añadir nada más).
- Colocamos la mezcla en los moldes de silicona (si es un molde tradicional, lo podemos untar con aceite de coco para facilitar a la hora de desmoldar).
- Metemos en el horno unos 12-15 minutos, controlando que no se quede muy secos.
- Servir y ¡¡¡LISTO!!!
TRUCO: Para comprobar el punto de cocción, podemos pincharlo en el centro con una aguja fina y ver que sale completamente limpia.